Si decides probarlo, la preparación y la dosis son fundamentales para la seguridad.
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Receta básica:
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El jugo de ½ limón fresco.
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¼ de cucharadita (un poco más de 1 gramo) de bicarbonato de sodio.
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1 vaso de agua grande (unos 200-250 ml).
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Preparación:
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Exprime el medio limón en el vaso de agua.
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Añade el bicarbonato. ¡Verás que hace efervescencia!
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Espera a que la reacción se calme y bébelo inmediatamente.
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Advertencia crucial: Nunca uses más de la cantidad indicada de bicarbonato. Un exceso puede ser peligroso.
Las Advertencias y Riesgos que Debes Conocer
Esta mezcla no es inocua y no es para todo el mundo. Es fundamental considerar lo siguiente:
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Alto en Sodio: El bicarbonato de sodio es, como su nombre indica, rico en sodio. Esto puede ser un problema para personas con hipertensión arterial, problemas cardíacos o renales.
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Puede Interferir con Medicamentos: Puede alterar la absorción de ciertos medicamentos, como algunos para la presión arterial y otros. Consulta siempre con tu médico si estás bajo tratamiento.
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Erosión del Esmalte Dental: El limón es muy ácido y puede dañar el esmalte de los dientes. Para minimizar esto, enjuágate la boca con agua normal después de beberlo y espera al menos 30 minutos para cepillarte los dientes.
