Para determinar qué falda se adapta mejor a tu cuerpo, considera tu silueta: faldas de corte A si tienes caderas amplias, faldas lápiz si buscas acentuar curvas, y faldas acampanadas para equilibrar hombros más anchos.
Aquí tienes una guía más detallada:
Faldas de corte A:
Son versátiles y favorecen a la mayoría de los tipos de cuerpo, especialmente a las mujeres con caderas anchas, ya que equilibran las proporciones.
Faldas lápiz:
Son ideales para las mujeres con silueta de reloj de arena o rectangular, ya que marcan la cintura y acentúan las curvas.
Faldas acampanadas:
Ayudan a equilibrar hombros más anchos en un cuerpo de triángulo invertido.
Faldas con cintura alta:
Son una excelente opción para mujeres con forma de manzana, ya que ayudan a definir la cintura.
Faldas midi y largas:
Son favorecedoras para mujeres altas, mientras que las faldas cortas pueden hacer que las mujeres más bajas parezcan más altas.
Faldas con detalles:
Las faldas con volantes o aberturas laterales pueden ayudar a alargar visualmente las piernas.
Faldas asimétricas:
Pueden ayudar a dirigir la atención hacia las piernas y alejarse de la parte superior del cuerpo.
Faldas con cintura elástica o ajustable:
Son ideales para disimular la zona del abdomen y proporcionar comodidad.