Recuerda esta importante regla:
si decides no actuar, no hay problema.
Pero si lo haces, persevera hasta el final. De lo contrario, sufrirás las consecuencias.
Las acciones inconsistentes sólo crean caos y le dan a tu oponente más razones para presionarte.
3. Crecer, vivir mejor
Pregúntate: ¿por qué alguien se dejaría atacar por ti?
Porque se cree más fuerte, más inteligente, más seguro o más exitoso.
Si reaccionas demasiado emocionalmente, el resultado puede ser doble:
-
o la persona se asustará y se retirará,
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o por el contrario, presionará aún más fuerte.
En tal situación, intente aplicar el “efecto tigre”, un concepto de la economía.
Es un estado en el que la presión externa desencadena el autocontrol y la motivación interna, ayudando a la persona a crecer y superarse.
De hecho, de todas las maneras de responder a la negatividad, la superación personal es la más poderosa y efectiva.
Deja que los ataques y la subestimación de los demás se conviertan en tu combustible.
No pierdas el tiempo en discusiones y desacuerdos. Úsalo para leer, hacer deporte, autoeducarte y desarrollarte personalmente.
