Beneficios para el corazón:
Este café también tiene un efecto protector sobre el sistema cardiovascular. Consumido con moderación, el café puede reducir el riesgo de enfermedades cardíacas gracias a sus antioxidantes que disminuyen la inflamación y mejoran la función endotelial, es decir, la capacidad de los vasos sanguíneos para expandirse y contraerse adecuadamente. La cúrcuma reduce la presión arterial y el colesterol malo (LDL), mientras que aumenta el colesterol bueno (HDL). Además, previene la oxidación de las grasas en la sangre, lo que disminuye el riesgo de placas en las arterias.
La canela es conocida por su capacidad para reducir la glucosa en sangre, estabilizar los niveles de insulina y mejorar la sensibilidad a esta hormona, lo cual es vital para prevenir la diabetes tipo 2, una condición que muchas veces está relacionada con enfermedades cardiovasculares. El jengibre también contribuye a la salud del corazón al diluir la sangre ligeramente, reduciendo así el riesgo de coágulos y accidentes cerebrovasculares. También tiene un efecto hipotensor y es útil en personas con presión arterial elevada.
Beneficios para las articulaciones:
Las personas que sufren de dolores articulares, ya sea por artritis, artrosis o inflamaciones musculares, también pueden encontrar alivio en esta bebida. La cúrcuma es uno de los antiinflamatorios naturales más potentes conocidos, y su acción es tan efectiva que en algunos estudios ha mostrado efectos similares a medicamentos como el ibuprofeno, sin causar los efectos secundarios de estos. Al combinarla con el jengibre, se crea una sinergia que reduce la rigidez, la hinchazón y mejora la movilidad en las articulaciones.
Beber este café diariamente podría ayudar a quienes padecen enfermedades inflamatorias crónicas a llevar una vida más activa, con menos dolor. Además, como el café estimula la circulación, también contribuye a la oxigenación de los tejidos, lo que favorece la recuperación muscular tras esfuerzos físicos.
Refuerzo inmunológico: