Lo que la ciencia realmente dice sobre las hojas de guanábana y el cáncer (La verdad en 2025)

Más de 200 estudios (la mayoría publicados entre 1990 y 2024) muestran que las acetogeninas pueden:

  • Interrumpir la producción de energía en las células cancerosas (especialmente en las líneas de cáncer de mama, próstata, páncreas, pulmón y colon)
  • Desencadenar la apoptosis (muerte celular programada) en células cancerosas, dejando intactas a la mayoría de las células sanas.
  • Funcionan de forma hasta 10.000 veces más selectiva que algunos fármacos de quimioterapia en experimentos en placas de Petri.

Fuente clave: Una revisión de 2022 en Frontiers in Pharmacology resumió más de 20 años de datos y calificó los resultados de “prometedores pero preliminares”.

2. Evidencia humana muy limitada

La realidad es la siguiente: a partir de 2025, todavía no existen ensayos clínicos en humanos a gran escala y bien controlados que demuestren que las hojas de guanábana previenen, tratan o curan el cáncer en las personas.

Un pequeño estudio piloto de 2021 en Indonesia (42 pacientes con cáncer colorrectal) descubrió que las cápsulas de hojas de guanábana como terapia complementaria mejoraron levemente la calidad de vida y redujeron algunos marcadores inflamatorios, pero no redujeron los tumores ni prolongaron la supervivencia.

Eso es todo en cuanto a datos humanos por ahora.

3. Posibles beneficios de apoyo respaldados por la ciencia

Incluso sin evidencia de cura del cáncer, las hojas de guanábana ofrecen varios beneficios comprobados que pueden ayudar durante el tratamiento del cáncer:

  • Efectos antiinflamatorios leves (Revista de Etnofarmacología, 2023)
  • Poder antioxidante superior al de muchas bayasInvestigación en Fitoterapia, 2024
  • Propiedades calmantes y que favorecen el sueño. Medicina complementaria y alternativa basada en la evidencia, 2022.
  • Uso tradicional para las náuseas y el alivio digestivo durante la quimioterapia.

Cómo usar el té de hojas de guanábana de forma segura hoy en día