Eucalipto: limpieza profunda de las vías respiratorias
El eucalipto (Eucalyptus globulus) es famoso por su capacidad de limpiar los pulmones y calmar los tos. Es un expectorante natural que ayuda a disolver la mucosa y mejorar la respiración.
Sus hojas contienen cineol, un compuesto con acción antiviral y antibacteriana que lo convierte en un aliado frente a gripes y resfriados.

Cómo usarlo:
El vapor de eucalipto se prepara hirviendo hojas frescas o unas gotas de su aceite esencial en agua caliente. Inhale el vapor con una toalla sobre la cabeza durante 5-10 minutos.
Diente de león: desinfectante del hígado y diurético
El diente de león (Taraxacum officinale) es una planta depurativa muy eficaz. Estimula la función hepática, ayuda a eliminar toxinas y actúa como diurético natural, reduciendo la retención de líquidos.
También mejora la digestión y contiene antioxidantes beneficiosos para la piel y la prevención del envejecimiento celular.

Cómo usarlo:
Las raíces y hojas pueden prepararse en infusión. Se recomienda tomarlo por la mañana y evitarlo en la noche por su efecto diurético.
Cúrcuma: raíz dorada con poder antiinflamatorio
La cúrcuma (Curcuma longa) es una raíz milenaria con potentes propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y digestivas. Su principal compuesto, la curcumina, ayuda a aliviar el dolor articular, proteger el hígado y prevenir enfermedades degenerativas.