Por qué nunca debemos ahuyentar a los geckos y lagartos domésticos

Los geckos no comerán nada de tu jardín, a diferencia de los pájaros.

Estas ágiles criaturas de cola no comen bayas, frutas ni verduras de tu jardín. En eso se diferencian de las aves, que también se alimentan de plagas, pero que también disfrutan de las bayas o frutas comestibles que cultivas. Las aves pueden parecer más dulces e inofensivas, pero en realidad pueden simplemente picotear toda tu cosecha, mientras que las lagartijas, por el contrario, pueden protegerla.

No son peligrosos para los humanos.

Puede parecer que los geckos tienen superpoderes porque pueden trepar por los techos y hacer ruidos extraños por la noche, pero en realidad no dan tanto miedo. Los geckos domésticos comunes no son venenosos ni representan una amenaza para los humanos (aunque pueden morder cuando se sienten angustiados), y de hecho prestan un servicio alimentándose de las plagas que hay alrededor y fuera de la casa.

Los geckos pueden ser portadores de salmonela, lo cual es fácil de evitar.

Los gecos pueden transmitir salmonela, como muchos otros reptiles. Y no lo hacen al morder, sino a través de sus heces. Así que, si encuentras excrementos de geco en algo, lávalo bien y, por supuesto, no los beses (ni a gatos, perros ni otros animales).

¿Conoces otros animales útiles que suelen ser maltratados? ¡Nos encantaría leer tus comentarios en la sección de abajo!