Estos alimentos también absorben agua del cuerpo y pueden aumentar los niveles de grasa o la presión arterial, empeorando el problema. Dado que el cuerpo continúa digiriendo mientras duermes, puede extraer líquidos de otras zonas, lo que provoca sequedad en la boca al despertar.
2. Problemas hepáticos.
El hígado desempeña un papel fundamental en la eliminación de toxinas del organismo. Cuando se sobrecarga o no funciona correctamente, las toxinas pueden acumularse. Un síntoma sutil es despertarse repetidamente con la boca seca. Si esto ocurre con frecuencia y no hay una causa aparente, es recomendable consultar con un médico.
