Además, el orégano favorece la salud del corazón y el azúcar en sangre . Algunos estudios sugieren que el carvacrol puede ayudar a reducir el colesterol malo (LDL) y aumentar el colesterol bueno (HDL), lo que disminuye el riesgo de enfermedades cardiovasculares. También puede ayudar a estabilizar los niveles de azúcar en sangre al mejorar la sensibilidad a la insulina.
En esencia, el orégano no es solo una hierba aromática, sino un poderoso sanador natural. Ya sea usado como especia, en infusión o aplicado como aceite esencial, el orégano ofrece una impresionante gama de beneficios que nutren el cuerpo desde dentro. Sus propiedades antiinflamatorias y analgésicas, combinadas con sus efectos inmunoestimulantes y digestivos, lo convierten en uno de los dones más valiosos de la naturaleza para mantener la salud y el bienestar holísticos.