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Teclado de ordenador: adiós a las migas y al polvo
Un solo cepillo es suficiente. Una pasada suave entre las teclas, quizás humedecida con un poco de alcohol isopropílico (con moderación), y tu teclado lucirá como nuevo.
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Para limpiar tus cepillos para el cabello

Sumerge tu cepillo de dientes en agua tibia con jabón o un poco de champú diluido y frota las cerdas. Un paso sencillo que elimina residuos, caspa y sebo en minutos.
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Botellas y jarrones: por fin accesibles
Calienta con cuidado el mango del cepillo sobre una llama o con un secador de pelo potente para doblarlo 90 grados. Ideal para alcanzar el fondo de recipientes estrechos como termos o jarrones pequeños.
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Rincones ocultos del baño: misión de limpieza

Doble el cepillo de dientes en forma de L, agregue el producto de limpieza y frote bajo los bordes o alrededor de los cierres . Recuerde desinfectar o desechar el cepillo después de usarlo.
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Rieles de ventanas y sellos de refrigerador
Las migas y el polvo se acumulan en estos pequeños espacios. Un cepillo angular y un poco de spray limpiador multiusos son suficientes para restaurar su limpieza y frescura.