Introducción:
El yogur casero es uno de esos placeres clásicos que nunca pasan de moda. Prepararlo en casa no solo te permite disfrutar de un sabor más fresco y natural, sino que también te asegura consumir exactamente lo que deseas. Este yogur cremoso y saludable es perfecto para cualquier momento del día, ya sea solo, con frutas o como base para otros postres. Además, es tan fácil de hacer que resulta una opción ideal para quienes buscan alternativas caseras en lugar de productos comprados en la tienda.
Ingredientes:
1 litro de leche entera (puede usar leche desnatada si prefiere una versión más ligera)
2 cucharadas de yogur natural (como iniciador para la fermentación)
1 cucharadita de azúcar (opcional)
1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional, para dar sabor)
Método de preparación:
Calienta la leche a fuego medio hasta que alcance unos 85 °C (185 °F), removiendo de vez en cuando. Esto ayuda a eliminar bacterias no deseadas y evita que la leche se queme.
Deja que la leche se enfríe hasta unos 45 °C (113 °F), que es la temperatura ideal para la fermentación.
En un bol pequeño, mezcla las 2 cucharadas de yogur natural con un poco de la leche caliente hasta que se disuelva por completo.
Vuelve a incorporar esta mezcla a la leche tibia y revuelve suavemente para que se distribuya uniformemente.
Vierte la mezcla en frascos o un recipiente grande y cúbrelos con una tapa o papel film.
